Inversión Extranjera Directa China podría bajar hasta en un 50% durante 2025

Desinversión y Reconfiguraciones: El Nuevo Mapa Económico de China en 2024

El año 2024 marca un punto de inflexión para China en materia de inversión extranjera directa. Por primera vez en décadas, el país experimenta un flujo neto negativo, con proyecciones que indican una salida de aproximadamente 10.000 millones de dólares. Las perspectivas para 2025 sugieren una posible ampliación de esta tendencia, con estimaciones de salidas de inversiones de cartera cercanas a los 25.000 millones de dólares.

Múltiples factores confluyen en este escenario complejo. La rentabilidad nacional reducida, la crisis inmobiliaria, las tensiones geopolíticas y la reconfiguración global de las cadenas de suministro están provocando un significativo desvío de inversiones. Mientras China enfrenta estos desafíos, países como India emergen como beneficiarios, especialmente en sectores manufactureros de alta tecnología.

Las proyecciones anticipan que la proporción de inversión extranjera directa de China en mercados emergentes continuará disminuyendo. Elementos como los potenciales aranceles estadounidenses, la política monetaria del Banco Popular de China y los bajos márgenes de interés bancarios añaden complejidad al panorama inversor.

La situación refleja profundos cambios estructurales: desde la debilidad del consumo interno hasta la necesidad de una transformación en el modelo de crecimiento económico. Los inversores internacionales observan con cautela, evaluando los riesgos y oportunidades en un contexto global cada vez más dinámico y competitivo.

El panorama para 2025 no parece más alentador. El IIF pronostica una posible ampliación de la salida de inversiones de cartera, estimada en unos 25.000 millones de dólares. Esta tendencia se ve reforzada por la reconfiguración de las cadenas de suministro globales, que están desviando inversiones hacia otros mercados emergentes, siendo India uno de los principales beneficiados, especialmente en manufacturas electrónicas.

Las perspectivas futuras incluyen riesgos adicionales. La posible reelección de Donald Trump en Estados Unidos podría significar nuevos aranceles que afectarían sectores clave de exportación china. La política monetaria del Banco Popular de China también ha sido cuestionada, con una postura que no ha logrado estimular suficientemente la entrada de capitales extranjeros.

A pesar de las promesas oficiales de flexibilidad monetaria, los bajos márgenes de interés bancarios y el riesgo para el yen pueden limitar significativamente las opciones de las autoridades económicas chinas, lo que podría provocar una continuación de las salidas de capital.

Notas Recientes

Notas Relacionadas

spot_imgspot_img