La logística en el sector químico es fundamental para el éxito de su cadena de suministro a nivel mundial. Las compañías enfrentan el desafío de gestionar un amplio rango de productos, incluyendo sustancias que pueden ser peligrosas, como gases inflamables, líquidos corrosivos y materiales tóxicos, desde la producción hasta la entrega final.
Estos productos requieren un manejo especializado y deben seguir estrictas normativas que salvaguarden tanto a los trabajadores como al medio ambiente y las comunidades en las rutas de transporte.
El transporte de estas sustancias presenta retos importantes que exigen un enfoque integral. A medida que las regulaciones internacionales aumentan en severidad y la demanda de prácticas sostenibles crece, las empresas necesitan adaptarse a nuevas tecnologías y enfoques que reduzcan los riesgos relacionados con el transporte de estos productos. Los productos peligrosos son aquellas sustancias que, debido a sus propiedades, representan un gran riesgo para la salud humana, la seguridad y el medio ambiente durante su manejo, almacenamiento o traslado.
Clasificación de los productos peligrosos
La ONU ha clasificado estas sustancias en nueve categorías principales, que incluyen tipos como
- Explosivos
- Gases tóxicos
- Líquidos inflamables
- Materiales radioactivos
- Solventes como acetona y etanol
- Gases tóxicos como el cloro y el amoníaco.
Recientemente, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes de México lanzó la Norma Oficial Mexicana NOM 011-1-SCT-2-2022, que busca facilitar el transporte de determinadas mercancías peligrosas. Cumplir con estas normativas es crucial para evitar sanciones económicas y daños a la reputación empresarial, así como para proteger vidas y el entorno.
Transporte de materiales peligrosos
Las empresas que manejan productos peligrosos deben contar con certificaciones que demuestren su capacidad para hacerlo de manera segura, siguiendo normativas como el ADR o el Código IMDG, y deben someterse a auditorías periódicas para asegurar el cumplimiento.
Retos en la logística y transporte de carga peligrosa
Los principales desafíos logísticos incluyen mantener la seguridad durante el manejo y transporte de estos materiales, que pueden ser propensos a fugas y reacciones peligrosas. Por lo tanto, se requiere un uso adecuado de envases y equipos de protección personal. Además, el almacenamiento de estas sustancias debe ser controlado, en condiciones específicas para garantizar su seguridad.
La capacitación del personal es igualmente importante, incluyendo una formación especializada para manejar productos peligrosos y prepararlos para posibles riesgos. La trazabilidad se vuelve esencial en la gestión del transporte de estos materiales, y muchas organizaciones están implementando tecnologías como el Internet de las Cosas para seguir en tiempo real la información sobre sus envíos, monitorizando variables críticas y recibiendo alertas en caso de irregularidades.
Los retos operativos incluyen elegir rutas seguras y coordinar con diferentes actores de la cadena de suministro, todo mientras se optimizan los tiempos de entrega. La variabilidad en regulaciones en distintos países también puede complicar el transporte internacional, lo que requiere un conocimiento preciso de las normativas locales.